La emisión de gases contaminantes se puede reducir cambiando nuestras costumbres.
A estas alturas ya sabemos que el CO2 que sale por el tubo de escape de nuestros coches es una causa importante de contaminación. Sin embargo, aunque no tengamos más remedio que usar el coche, es posible contribuir con el medio ambiente si tenemos en cuenta algunas premisas.
No dejes el coche encendido
Si vas parar durante más de un minuto conviene detener el motor para dejar de emitir gases.
No frenes y aceleres a fondo
Frenar o acelerar a fondo reduce la eficiencia de un auto hasta en un 33%. Lo mejor es acelerar y frenar gradualmente y poco a poco. Además, el ir a alta velocidad aumenta el consumo de combustible y genera mayor contaminación.
Revisa el filtro de aceite
Un motor bien lubricado expulsa menos humo y además mantener el filtro de aceite limpio para que entre aire correctamente influye directamente en el consumo.
Controla los residuos por mantenimiento
La contaminación no solo se produce por el humo que sale del tubo de escape, ya que el cambio de pieza, líquidos y otros repuestos que derivan de roturas o desgastes también generan una serie de residuos nocivos para el medio ambiente.
Trasládate en bicicleta u otros medios
En la medida de lo posible, trata de caminar o usar bicicleta para trayectos cortos o usar transportes alternos (transporte público, taxis) cuando no sea estrictamente necesario llevar tu carro. Además de estar menos estresado, ayudarás al medio ambiente.
Revisa el aire acondicionado
El uso indebido del aire acondicionado dispara el consumo hasta un 15%. Es necesario mantener el sistema revisado, con ausencia de fugas y con el gas correctamente cargado.
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